Ocurre.
Ocurre que a menudo no sé dónde está el norte.
Ocurre que tal vez no quiero mirarlo y…
Ocurre y ocurre.
Ocurre que cuando lo veo encaramado en lo alto de la luna se empañan los cristales.
O se estropea el limpiaparabrisas y se borra todo resquicio de vida en la ciudad.
Ocurre sin más. Sin razón de ser o con razones.