Hoy volví a sentir el frío bajo la piel. La imposibilidad de olvidar mi otro papel, me hizo pisar más fuerte las hojas de los árboles sobre el asfalto. Era otoño avanzado y el camino que recorrí una vez ilusionada se había vuelto del revés.
Más seguí avanzando músculos torpes sobre mis huesos, con el saber de que tal vez no había pasado nada. Y que el tiempo fue bueno. Y que la vida seguía de otra manera. Y seguía.
Y así rellené el documento para devolución de papelinas y confetis gastados de aquella otra vida. Poca cosa. Un momento para el recuerdo. Y volví al presente con mis pies sobre la hojarasca.
Eso sí al salir del registro saludé amablemente al funcionario.
Guiomar 52.
Isabel Montero Garrido 
Muchas gracias….me encanta Vivaldi….y todas las estaciones
Date: Mon, 14 Dec 2015 14:22:35 +0000 To: ialonsoa@outlook.com
Gracias a tí Ines. Un abrazo.
Hermosa expresión poética del sentimiento de lo que fue y no es, guiomar. Me ha gustado mucho.
Un cariñoso abrazo.
Gracias, sí ha sido un fogonazo de hoy. Hablaremos. Me alegra que te guste. Pinchaste la música abajo? Un abrazo grande Isabel.
Sí, escuché el otoño de Vivaldi, se me olvidó decírtelo. ¡Gracias!
Bonita entrada, Guiomar!
Sí, la vida siempre sigue, aunque sea de otra manera. Muy cierto.
Me encanta Vivaldi. Lo utilicé para mi entrada sobre el otoño. Una casualidad 😉
Besetes y te sigo.
Gracias María. Si que casualidad lo de Vivaldi!. Me alegra que te guste la entrada. Un abrazo.
Y sigue la vida sigue, buena marración mirar hacia atrás solo para dar el paso adelante. Giomar muy lindo, se siente ese crepitar de la hojarasca. besiños.
Gracias Araceli. Hojarasca es una palabra para mí potente que llena la boca. Me alegro de verte por aquí. Un abrazo
Guiomar y a mi me suena el crepitar al pisar, es sentir es oler es humedad …Otoñal bueno es potente jajaja . ¡Tu lo has dicho!. Es un placer.