Aniversarios

Feliz día de la Constitución

La primera vez que voté por edad fue la Constitución Española y lo hice muy ilusionada por muchos motivos. El primero fue la ansiada democracia; en segundo lugar, el inicio del camino hacia la igualdad de derechos, para la mujer entre otros. También esperaba un camino abierto a la igualdad social y al estado de bienestar.

Con ese ánimo empecé a trabajar en la enseñanza en 1981 inculcando los valores democráticos a mis alumnos. Entre ellos y sobre todo la igualdad y el respeto.

Entonces, estimo que tanto la ciudadanía y los poderes públicos hicimos un ejercicio de ciudadanía democrática grande para que un estado democrático fuera la base de una sociedad más justa.

Hoy en 2022, me horroriza pensar que esto se pueda ir al traste con un mal desenlace

Por ello, ánimo a la reflexión y a la concordia. Pido a los representantes elegidos democráticamente que dejen de destruir y sumen todo, para el logro de un País encauzado en los valores democráticos que deben presidir el marco de todo estado moderno que trabaja para el bien de los ciudadanos.

© Isabel Montero

Sobre libros

La familia, Sara Mesa

“En está familia no hay secretos”, Sara Mesa

Inquietante, hipnótica, diferente. Pone de manifiesto la violencia intrafamiliar y sus consecuencias. La comunicación inconexa o la ausencia de esta y lo aborda desde la perspectiva de una escritura diferente y una forma de narrar muy personal. El libro es una radiografía de la soledad y la familia. Muy bueno.

Se lee en dos ratos porque atrapa.

Isabel Montero Garrido

Aniversarios

Día Internacional de las personas con discapacidad, 3 de noviembre.

Testimonio

Podría contar mi vida que como muchas vidas de personas con discapacidad es una historia de superación continua y constante.
No es necesario, cada uno lo sabe y las personas que le quieren de verdad y le rodean también lo saben también.
Soy sorda severo profunda en la amplia gama de grises de la sordera. A ella se asocian retos físicos que hay que superar.
En mi trabajo sufrí moobing y falta de empatía por las personas que consideraba amigos. Esto me hizo fuerte y además de trabajar de forma muy competente en la enseñanza, me permitió visibilizar la realidad de mi discapacidad y demostrar que no somos discapaces.
Aprendí a ser yo. Y encontré lugares mejores y personas mucho más auténticas, más hermosas.

Me gustaría dar visibilidad a la amplia gama de la discapacidad auditiva.
Por nuestra fuerza.
Por nuestros derechos.

Isabel Montero Garrido

poesía Isabel Montero Garrido

Amor

Domingo en Madrid desde la chocolatería Valor

Me gusta cuando nos escapamos como amantes furtivos, y exploramos la ciudad y sus rincones , y nos sentamos en esa terraza del bar de cualquier barrio, entre la gente, casi ocultos, y entonces, nos tomamos de las manos como si fuera la primera vez.
Me gusta cuando volvemos a casa, sonreímos, y nos miramos a los ojos, y nos besamos rápido dentro del ascensor para no ser vistos.
Tu rostro y mi rostro
y la complicidad tambien mañana.

©Isabel Montero

Foto, Isabel Montero

Sobre libros

Amarga Luz

Una novela fascinante, apasionada, lírica y conmovedora . La tragedia amorosa entre la escultora Marga Gil Roesset y Juan Ramón Jiménez . Simboliza la liberación del espíritu romántico .

Es una novela que recomiendo leer.

Enhorabuena Marga, Marga Clark por este trabajo y gracias, por la luz que aportas a la figura de tu tia y por los documentos y cartas originales. Ha sido un.verdadero placer leerte.

Isabel Montero

Pensamientos · relatos Isabel Montero Garrido

Las cosas de la vida

Isabel, 12 o 14 años

gabon y las cosas de la vida.

A medida que pasan los años me doy cuenta de que por fuera no soy la misma persona. Todos los días me miro en el espejo y, arrugas, arrugas, arrugas y flacidez. Así que me embadurno de cremas para antes, despues, durante… Yo no soy de botox, ni de infiltraciones. Las únicas que me pongo son cadera-columna-rodilla.
Mi cuerpo tiene una tendencia a engordar sin apenas comer, cosa del aire supongo. Mi piel no es nada tersa y estoy torpe. Camino mal y peor. Sin embargo , mi mente vuela igual que si tuviera 7, 15, 18… años. Cada dia me observo y soy capaz de asombrarme, emocionarme igual que entonces.
Así que canto y río y sueño y bailo. Me ilusiono y por cualquier cosa noto mariposas en el estómago.
Luego me miro en el espejo y veo la vejez que tanto me horroriza.
Nunca hubiera imaginado que la mente se mantuviera eternamente joven .

Isabel Montero