A Carmelo Vallés, in memorian.
A mi amiga Txus
Recuerdo irrumpir en la joyería
de tu padre, como dos huracanes
y a tu padre mirar, cabecear
benevolente, y tal vez complacido,
aunque nunca lo dijo. Mirar, si,
esa algarabía tan nuestra,
tan adolescente entonces.
Aquellos veranos en los que la brisa
rozaba nuestros brazos, aún infantiles,
en aquellos Sanfermines, primerizas
nosotras, que queríamos, y eso es
seguro, tumbarnos sobre la hierba de
«La Taconera», y encender un cigarro
para soplar el humo al aire.
Y al final no ocurría y tú padre
nos dejaba en el baile del Club
Natación
Aquellos Sanfermines soñábamos
blanco, sin saber que la vida, sería
dificil.
Isabel Montero Garrido
Bihotz bihotzez María Jesús.

Imagen subida de Internet
Ay, la Taconera, la Media Luna, el Redín, Fútbol en San Juan, café en el Iruña y a bailar al Club Natación, que para eso era domingo, allá por el 66 del siglo pasado. Precioso el poema.
Algo más tarde nosotras. La joyería Vallés en calle Calderería. Gran familia, gran persona Carmelo y una buena amiga que mantengo desde muy pequeñas. Un gran abrazo!!!
Hermoso poema de recuerdos, vivencias, esencia de la vida misma. Un epigrama para enmarcar en la memoria. Mi abrazo, y mi sentimiento por Carmelo Vallés.
Gracias Julie, su hija recogerá este sentimiento y yo también. Te lo agradezco de corazón. Carmelo ha sido un hombre bueno, con mucho cariño a los suyos!!! Gracias querida Julie!!!!
Entrañables recuerdos, con todo cariño.
Si el padre de una gran amiga, un gran hombre Carmelo!