
Testimonio
Podría contar mi vida que como muchas vidas de personas con discapacidad es una historia de superación continua y constante.
No es necesario, cada uno lo sabe y las personas que le quieren de verdad y le rodean también lo saben también.
Soy sorda severo profunda en la amplia gama de grises de la sordera. A ella se asocian retos físicos que hay que superar.
En mi trabajo sufrí moobing y falta de empatía por las personas que consideraba amigos. Esto me hizo fuerte y además de trabajar de forma muy competente en la enseñanza, me permitió visibilizar la realidad de mi discapacidad y demostrar que no somos discapaces.
Aprendí a ser yo. Y encontré lugares mejores y personas mucho más auténticas, más hermosas.
Me gustaría dar visibilidad a la amplia gama de la discapacidad auditiva.
Por nuestra fuerza.
Por nuestros derechos.
Isabel Montero Garrido
Bravo Isa!!!!
Gracias Rafa!!!
Un fuerte abrazo, amiga.
Fuerte abrazo, Alfonso!