Epifanía en la luna
Fotos Isabel Montero
La mañana se sirve atemporal,
omnipotente;
El agua. las rocas y el ruido que nunca duerme
el vaivén en movimiento
se desperezan.
El aire que peina las dunas,
aligera el ocaso
el momento que marcan los siglos,
lo difumina.
Camina por la arena con los pies descalzos
después de besar una espalda dormida.
-Alevosía de la diosa Afrodita-
Vídeo subido de Internet
Noche-luz vida anestesiada con un beso, una palabra
cierta o no. Amanece muy claro-hotel de cinco estrellas.
Dos maletas abiertas de par en par, sonido de mar a través
de la ventana. Cuerpos desnudos, arrebujados más, más
un poco más. Seis, siete, ocho éxtasis prolongados.
La camarera ha traído vino de cava.
y sudor de manzanas dulces.
El mar sigue detrás de la ventana.
EN-FRENTE la otra orilla, luz-noche-hotel de lona verde.
Vida anestesiada no- con- un-beso, no-con- una- palabra.
ropas-rotas-pies-mojados-labios-secos-mirada-rajada.
Los cuerpos se arrebujan. Seis, siete, ocho éxtasis alternos
a causa de la bombilla del generador.
El voluntario ha traído mantas.
pan- en- bolsa- de- plástico.
No hay ventana para escuchar el mar.
El amor incondicional
es el amor de una madre
A mi madre Cecilia allá donde esté,
A mi hija Raquel,
mis dos amores.
Hoy quiero compartir con vosotros este día dedicado a todas las madr@s, a las presentes y a las que llevamos en el alma.
Mi maravillosa hija me ha hecho un hermoso regalo: su presencia y su cariño. No se puede pedir más. Es el amor entre madre e hij@s lo que hace que todo sea especial. Las madres no necesitamos grandes o valiosos regalos, un pensamiento, una palabra, una mirada, son suficientes.
Me gustaría, mis queridos lectores haceros participes del pequeño-gran reportaje de mi felicidad con mi hija Raquel.
Quiero dar las gracias a mi yerno/hijo Jesús y a sus padres Jesús y María por enviarme este vídeo tan emotivo cantado por Luis Mariano, canción que casualmente me enseñó mi madre. Creo que el tema de Luis Mariano no puede ser más elocuente.
Con este vídeo quiero felicitar a todas las madr@s, a las que están y a las que se nos han ido, como mi ama Cecilia hace casi tres años. A Manoli y Victoria que se nos han ido recientemente.
A las madres, esas personas que dan sin pedir nada a cambio.
Isabel Montero Garrido 