Pensamientos

Cosas de miedo entre la prosa y el  verso

En la noche, cuando las voces susurran esto y lo otro, y el alma no se serena tan fácilmente a pesar de los barbitúricos que nos adormecen, y que nos tapan los chasquidos de la vida, en la noche, hay que permanecer atentos y expectantes, en lucha contra el miedo.
Y si supiéramos eso, si supiéramos la causa de ese miedo, esa que se esconde en los dobladillos del alma, o del cerebro, si lo supiéramos, el terror desaparecería mucho antes del alba.
©Isabel Montero Garrido
©Foto de Luis Sayalero

Poesias Guiomar52

Fantasía

Suena el bosque

y la humedad teje lacónicas figuras

que se esfuman casi negras,

casi sin haber nacido.

Espejismos

y sonidos que se repiten

ecos, crujidos, resonancia

y aullidos

que ultrajan primaveras.

Suena el bosque

abrupto,

sombrío

lúgubre

y tenebroso

y suena, lejos de ser paraíso.

Nos penetra helado, contra el vientre

como torrente glacial breve

que nos corta

que nos amortaja parco.

Umbria

casi opacidad.

Soledad.

Miedo

No hay hadas que conformen cielos.