¿Qué hubo debajo del olor a tierra
de la arcilla húmeda, del coche sin rumbo
del pañuelo al aire y del pic- nic en la carretera?
¿Qué hubo tras el resort de lujo
y un beso robado al sonido del mar?
¿una playa de piedras?
¿por qué aquella palmera sin plátanos,
la mirada amante en un patio de flores ya secas?
Se escondía el alma, y se escondía
en la taza de café del desayuno
en el sabor de mantequilla salada y tostadas
con miel.
Una foto robada, una fuente detrás del frío, de gotas de agua
sobre nuestras cabezas.
¿Otro beso, otro beso de verdad o de mentira?
¿Alucinación o sueño?