Juana I de Castilla, conocida como Juana la Loca (Toledo, 6 de noviembre de 1479 – Tordesillas, 12 de abril de 1555), fue reina de Castilla de 1504 a 1555 si bien desde 1506 no ejerció ningún poder efectivo y a partir de 1509 vivió encerrada en Tordesillas primero por orden de su padre Fernando el Católico y después por orden de su hijo el emperador Carlos V.
http://es.wikipedia.org/wiki/Juana_I_de_Castilla
Juana La Loca es una figura que me intriga ¿y a quien no?: mezcla de pasión, deseo, frustración, desilusión, abatimiento, soledad y seguramente gran inteligencia. No me cabe duda que así sería. ¿Y que diría Jauna ahora en el S XXI? Probablemente lo mismo. He querido plasmar una desesperación honda e íntima de una mujer que seguramente ahora llegaría a Flandes en avión «Para casar con Felipe El Hermoso». Triste historia la de esta mujer. Triste destino. ¿Había miedo a su inteligencia? Seguro. Sin duda, una gran mujer que como muchas mujeres sufrió demasiado.
Este poema quiere ser un apunte a las mujeres que sufren demasiado. De Juana La Loca a Felipe El Hermoso… Veamos…
Bajar del avión en Flandes es entrar en un lugar insospechado,
desconocido del todo.
Perverso.
¡Silencio!
¿Y donde está él?
¿Dónde está Felipe?
¿No lo veo
o no lo reconozco?
No está.
No aparece entre el séquito que me recibe.
Pasos sobre la alfombra roja.
No se nada.
¡Silencio!
Solo zumban mis oídos.
¡Qué se callen!
Mi destino
queda atrás aparentemente indiferente.
Nauseas.
Nauseas y frío en mis sienes.
¡Silencio!
¿ Quien eres y quien soy?
¿Sí quien eres tú para burlarte con indiferencia?
Necesito encontrar una ilusión.
Necesito.
Deseo,
tener tu voz ante mis ojos.
Necesito por fin tu lengua entre mis dientes.
Morder tus labios.
Necesito poseer tu boca.
Necesito que tus dedos recorran mi vientre y que se deslicen ágilmente entre mis piernas..
Necesito tu miembro revolverse en mi vagina
hasta caer exhausta.
Necesito mil orgasmos repetidos.
Y tú, te vas.
Mil veces fuera.
Mil veranos.
Mil inviernos fríos
Mil primaveras que no florecen.
Mil otoños de hojas disecadas en los parques.
Y tú, te vas.
Volcando tus amores en vientres de otras madres.
Y yo recorro desnuda los pasillos
buscándote, ajena al mundo
ajena a mi vientre, ajena.
Y es así, ajena, hasta parir en los rincones.
Es deseo- casa- vacío.
Y muero.
Muero por ti enloquecida.
Y tü mueres.
¡Silencio!
Duermes.
Mueres.
¡Silencio!
Sentir.
Latir.
Vibrar y volver a parir sobre el suelo frío.
Y tú, mueres.
¡Silencio!
Duermes.
Sigo despojada de mi ropa
envuelta en los harapos de mis celos.
Encerrada en la torre de mi cuerpo.
Presa.
Latir en mi cerebro.
Mi razón es abatida.
¿O no estoy loca?
¡Silencio!
El poema es poderoso. Está muy bien. Pobre Juana, la mujer cuyo único crimen fue amar demasiado (y a quien no debía)
Sí. ¿cuántas Juanas habrá que amen demasiado? Gracias por tu comentario.En verdad es un poema como dices poderoso más que fuerte.
It’s arduous to find educated people on this subject, but you sound like you recognize what you’re talking about! Thanks
Thanks
¡Loca de amor ! ¡Qué fuerte! Y pensar que la Historia se repite, que cada vez hay más víctimas del amor.
gracias por leerme Soledad. Es verdad lo que dices. Yo creo también que fue apartada por su inteligencia.Besos